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Te presentamos algunos tips para convertir tu dieta de buena, a grandiosa.

Te presentamos algunos tips para convertir tu dieta de buena, a grandiosa.

Una de las formas más fáciles de mejorar tu dieta es aprendiendo cómo ser un mejor comprador. “Del 60 al 70% de lo llevas en tu carrito de supermercado no estaba planeado”, dice Bonnie Taub-Dix, nutrióloga y autora del libro “Read It Before You Eat It” (Léelo antes de que te lo comas). Necesitas aprender en dónde los pequeños cambios pueden hacer grandes diferencias antes de ir al súper.

“Es crucial aprender a leer las etiquetas”, dice Taub-Dix. “Es fácil quedar impresionado por el frente de cada paquete, y ver frases como “natural”, “fresco” y “orgánico” que no significan nada. Taub-Dix alienta a todo el mundo a leer la lista de ingredientes contenidos antes de seleccionar cualquier alimento. Para ello,  te presentamos una lista de las grandes áreas para cambios positivos en tu dieta.

Local en lugar de orgánico (la mayor parte de las veces)

Los Mejores Regalos

En un mundo perfecto, comeríamos productos locales, producidos orgánicamente. Pero en realidad, a menudo nos vemos forzados a escoger entre las frutas y verduras del supermercado y los alimentos frescos de los mercados y puestos locales. En este caso, lo mejor es lo local.

“Los alimentos locales no tienen que viajar de muy lejos, así que son mejores para el ambiente y dejan menos residuos de carbono”, dice Taub-Dix. Debido a que son más frescos, también tienen más nutrimentos, así que son mejores para tu cuerpo también.

Si estás preocupado por los pesticidas, Taub-Dix sugiere la variedad. Comer una variedad de frutas y verduras es la mejor forma de obtener los nutrimentos que tu cuerpo necesita y te asegura que no vas a tener mucho de un solo producto químico en tu dieta.

Los alimentos con cáscaras duras, menos porosas (como melones o sandías), son menos susceptibles a los pesticidas, así que siempre es mejor escoger los locales.

Salmón salvaje en lugar de salmón de granja

Comer pescado es una gran forma de obtener proteínas y ácidos grasos Omega-3, pero desafortunadamente nuestras aguas cada vez están más  contaminadas, por lo que ni los salmones de granja ni los salvajes son una opción ideal.

El salmón de granja es más grande y tiene más grasa y bifenilos policlorados (PCBs, por sus siglas en inglés), un contaminante tóxico y conocido carcinógeno para animales. Un estudio reciente realizado por EWG encontró que los niveles de PCB en los salmones de granja son 16 veces más altos que aquellos encontrados en el salmón salvaje.

Las granjas de peces de alta densidad son terrenos naturales de cría para otros patógenos, como piojos marinos

(Lepeophtheirus salmonis). En algunas granjas de peces del Pacífico, los piojos marinos se han convertido en un problema tal que todos los salmones jóvenes están muriendo por la infección de los piojos.

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Los granjeros de salmones son culpables por el excesivo uso de antibióticos para prevenir la proliferación de la enfermedad en los cardúmenes atestados de salmones. Muchos de estos antibióticos son los mismos usados para tratar la enfermedad en humanos.

Por último, los salmones de granja están llenos de colorantes y tintes artificiales. Sin las pigmentaciones como la Cantaxantina que ha sido ligada con problemas de la retina, los salmones serían completamente grises.

Carne real sobre procesada

La carne procesada puede tener lugar en tu dieta, pero es mejor evitar usarla como un alimento principal y optar por otras opciones. La mayoría de las carnes procesadas tienen altos niveles de grasas saturadas y colesterol, así que lo recomendable es optar por el pavo, el pollo y los jamones magros. Evita también los nitritos que se utilizan como conservadores siempre que sea posible, ya que pueden disparar las migrañas y convertirse en un químico causante de cáncer en el estómago.

La mayoría de las carnes procesadas tienen también cantidades extremadamente altas de sal: una sola porción puede contener más de la mitad de la dosis diaria recomendada. Una opción mucho mejor es el pavo fresco rebanado, o el jamón y el roast beef para tu emparedado. Pero recuerda que al estar frescos, no tienen conservadores, por lo que necesitarás consumirlas dentro de los primeros días de compra.

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