Dentalia nos habla sobre EL ADULTO MAYOR Y LA SALUD DENTAL
Por la Dra. Lorena Badial Ochoa
Dentista de profesión, odontopediatra de vocación.
Gerente de atención y experiencia al paciente en dentalia, decidida a dejar un mundo mejor.
La edad adulta es esa etapa dorada de la vida, donde todos deseamos disfrutar tranquilamente de lo logrado a través de nuestros años de experiencia y trabajo. Y para esto es indispensable gozar de una buena salud.
Conforme pasa el tiempo y nos hacemos mayores, resulta fundamental seguir cuidando nuestra boca. Existe una idea equivocada sobre lo inevitable que es perder los dientes, nada más lejano a la verdad debido a que, si tenemos las medidas adecuadas y los cuidados necesarios, los dientes pueden durarnos toda la vida.
El cuerpo cambia con el pasar de los años y de la misma forma las estructuras de nuestra boca y dientes. Las mucosas se resecan y pierden elasticidad. Así mismo, los dientes sufren desgastes en la superficie y los nervios que están dentro de ellos se hacen más pequeños. Estos cambios, que son naturales del envejecimiento, pueden hacernos más propensos a sufrir algunas alteraciones como lesiones en las encías, incluso a que la sensibilidad de los dientes disminuya o dejen de tenerla por completo y desarrollen infecciones sin que nos percatemos a tiempo.
Por esto, al igual que en todas las etapas de la vida, las revisiones en la edad adulta deben seguir haciéndose periódicamente para detectar cualquier cambio y resolverlo de inmediato.
La importancia de una óptima salud dental en nuestra última etapa de la vida
En la actualidad, sabemos que conservar la salud oral del adulto mayor sí es posible, solo necesitamos conjugar hábitos de higiene dental adecuados con una dieta balanceada y un estilo de vida favorable, sin hábitos nocivos como lo es fumar. En dentalia estamos convencidos que los dientes no se pierden por el envejecimiento sino por las enfermedades bucales asociadas a enfermedades crónicas, a la mala nutrición y a una deficiente higiene dental.
Es importante que la familia y los cuidadores del adulto mayor se involucren en su salud dental, elegir un cepillo adecuado a las necesidades de cada paciente, el tipo de pasta dental y los auxiliares necesarios, garantizarán los resultados deseados.
Algunos consejos para preservar y mejorar la salud dental y bucal en los años dorados:
SI EL PACIENTE TIENE DIENTES NATURALES:
- Lavarse los dientes después de cada alimento con un cepillo de cerdas suaves. En los casos donde haya una disminución de las habilidades motoras manuales puede ser muy útil usar un cepillo de dientes eléctrico.
- Utilizar hilo dental una vez al día, para este fin existen aditamentos que ayudan a usarlo cuando hay problemas de motricidad manual.
- Eliminar o disminuir hábitos nocivos principalmente fumar, pues aumenta las posibilidades de desarrollar cáncer de pulmón y cáncer de boca, y agrava la resequedad de la mucosa bucal.
- Acudir al consultorio dental para limpieza profesional y revisiones dos veces al año.
SI EL PACIENTE USA DENTADURAS POSTIZAS (PARCIAL O TOTAL):
- Limpiar las encías y la parte interna de las mejillas de los pacientes sin dientes con una gasa húmeda para retirar los restos de alimento que se puedan quedar ahí.
- Masajear la parte de las encías que quedan cubiertas por las prótesis para promover una mejor irrigación sanguínea.
- Las dentaduras parciales o totales removibles deben ser lavadas diariamente después de cada alimento, con un cepillo de cerdas duras y con jabón líquido. Adicional a este lavado existen ciertos productos en el mercado (pastillas efervescentes) para dejar las prótesis en agua con estas sustancias para terminar de limpiarlas y desinfectarlas.
- Las prótesis deben dejarse de usar por la noche durante el periodo del sueño para que los tejidos se recuperen. Si eso no es posible, al menos dejarlas de usar por unas horas resulta muy benéfico para que las encías se recuperen de la presión de las prótesis.
- Cada 5 años de colocadas, se debe revisar la adaptación de las dentaduras a los tejidos bucales, los tejidos óseos de soporte van sufriendo cambios y disminución de volumen lo que provoca que dejen de estar en contacto adecuado con las prótesis.
Al adoptar hábitos bucales sanos en casa, tomar decisiones inteligentes sobre la dieta y el estilo de vida, así como acudir al dentista con regularidad, podemos lograr que los dientes nos duren toda la vida.
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