Estoy lesionado ¿utilizo calor o hielo? Nosotros te lo explicamos a detalle
Estoy lesionado ¿utilizo calor o hielo? Nosotros te lo explicamos a detalle
En cualquier momento puedes tener una lesión debido al entrenamiento con pesas o a la práctica de algún deporte, así que Evolución.media te dice cuál es el procedimiento más adecuado para aplicar calor o hielo, según sea el caso, como en las lesiones por sobreentrenamiento o por competencia deportiva.
Lesión en un tobillo
Luego de haber corrido es fácil que de pronto, al subir la banqueta, te tuerzas el tobillo.
La respuesta inmediata de tu cuerpo es la inflamación debido a los tejidos y vasos sanguíneos dañados
y generalmente son cuatro los síntomas que se presentan principalmente: enrojecimiento, dolor, calor e hinchazón.
Además de que puede haber una fuga de los vasos sanguíneos, lo cual significa que se ha derramado el líquido entre los espacios del tejido muscular, provocando inflamación. En tanto que el dolor es provocado por el daño a las fibras nerviosas, a las sustancias químicas que irritan los nervios,
o a la mayor presión debido a la hinchazón.
Cuándo es
conveniente usar hielo
La forma más fácil de recordar el procedimiento correcto después de una lesión repentina y dolorosa es hacer una analogía con un incendio.
Esto es algo rojo y caliente, así que se necesita agregar agua fría para controlarlo. Igualmente, el agua fría y el hielo reducen la hinchazón, el enrojecimiento
y el calor en el área lesionada, ya que contraen los vasos sanguíneos, lo cual disminuye el flujo de la sangre y la fuga de líquido.
Y aunque no deja de sentirse dolor, debido al tejido dañado y a los nervios irritados, a largo plazo la curación es más rápida, ya que se acumula menos líquido en el tejido muscular.
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¿Durante cuánto tiempo debo utilizar el hielo?
Debes aplicar hielo al tobillo durante 15 ó 20 minutos, cada hora, con la pierna elevada, de 2 ó 3 días.
Puedes triturarlo y ponerlo en una toalla, en una bolsa de hielo o inclusive en una bolsa para vegetales congelados (de esta forma permanecen fríos por más tiempo).
El hielo te producirá una sensación de frialdad, después de ardor, y por último, de entumecimiento.
Pero evita aplicártelo durante más de 15 ó 20 minutos, pues de lo contrario se producirá la reacción opuesta, es decir, los vasos sanguíneos se expandirán de nuevo y se producirá más inflamación, que es precisamente lo que se intenta evitar.
Terapia de frío
La crioquinésis es una nueva forma de tratamiento en el que se utiliza la terapia del frío para robustecer y mejorar la movilidad, eliminando la tolerancia al dolor. Y Consiste en aplicar hielo al tobillo (hasta que toda el área se sienta entumecida), y después caminar hasta que se sienta la molestia.
Tiene el inconveniente de que al aplicarla, corres el riesgo de hacer más grave la lesión si el dolor está enmascarado por el efecto anestésico del tratamiento con hielo.
Su propósito es recuperar el rango de movimiento normal sin dolor, además de fortalecer la articulación, ayudando a reducir la inestabilidad
y debilidad del tobillo, ya que eso, más adelante, puede provocar problemas al caminar debido a los nervios dañados.
Cuándo se debe utilizar calor
El mejor momento para utilizar calor como medio de terapia es cuando el músculo se está rehabilitando
y se está reiniciando el movimiento de la articulación, que se perdieron debido a la hinchazón y la inflamación.
En cuanto la inflamación y el dolor disminuyan, emplea calor para relajar los músculos tensos, aumentar la irrigación sanguínea en el área, aliviar el dolor
y reducir la inflamación antes del ejercicio.
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Cuando se aplica un calor húmedo, por ejemplo una toalla húmeda y caliente, el efecto es mejor que cuando se utiliza calor seco, lo que puede ser efectivo antes de cualquier estiramiento o ejercicio que implique movilidad.
Otro método efectivo es hacer estiramientos de los músculos bajo la regadera, de manera que el agua caliente caiga sobre el área que estás tratando de estirar.
El calor ayuda a que los músculos se relajen y aumenten su longitud de manera cómoda y segura.
Debiéndose aplicar calor durante los primeros 20 ó 30 minutos después de que la hinchazón ha disminuido, pero no más tiempo. Además de dejarse transcurrir una hora entre cada aplicación de calor.
